Es un momento difícil, generalmente son situaciones muy sentimentales. Si la herencia viene de algún familiar, entra el apego y la nostalgia. Pero ante la herencia de una casa, debemos pensar qué guardar.

Pasos a seguir

Lo primero es tener claro de que podemos disponer, si esa herencia es nuestra al 100% no hay duda. Otras veces es familiar, entre hermanos, etc. Es mucho más complejo. Si hay colaboración no hay problema, pero a veces todos quieren una misma cosa. En ese caso lo mejor es buscar una persona que todos acepten como lider, para que haga unos lotes de la forma más objetiva posible.

En cualquier caso, debemos ser frios y analíticos. Vamos a encontrar muchísimos recuerdos que nos van a mover a la nostalgia. Pero debemos intentar seguir adelante y empezar por separar lo que queremos guardar de lo que no.

También es importante fijar una fecha límite para empezar a separar las cosas que guardaremos de las que no. En muchos casos ese límite lo pondremos nosotros o nos vendrá dado por cada situación: si se va a vender la casa, si se va a vaciar para que resulte más espaciosa, o si uno de los familiares se va a quedar a vivir en ella, etc.

Cuadros antiguos en casa.

Ante la herencia de una casa, hay que pensar en que harás con los antiguos muebles, porcelanas, cristales, cubiertos, joyas, etc. Recuerda que siempre existe la opción de donar lo que no quieres a la caridad.

Una de las opciones es contratar un trastero por un tiempo, en Trasteros MAD lo mínimo son 14 días. De esa forma puedes hacer un paso intermedio y guardar los muebles hasta poder decidir que hacer con ellos. Incluso si son para la venta, puedes quedar en los mismos trasteros para enseñarlos a tus clientes. Ya sabes que hay muchas aplicaciones de venta de artículos de Segunda Mano como Wallapop o la Vibbo (la clásica segundamano)

Algo muy práctico es quedarte con pequeñas cosas que te traigan recuerdos, por ejemplo, no toda la decoración de navidad. Parte de ella la puedes incorporar a tu propia decoración y siempre te hará recordarles en las fechas navideñas.

Lo mismo pasa con los muebles. Por gustos o por épocas, seguro que hay cosas que no encajan en tu casa pero, si hay pequeños muebles que puedes incorporar a tu casa. Se convertirán en rincones o espacios especiales.

Y de cualquier forma, aunque es un paso muy duro hay que sentirse agradecido. Primero por tener la suerte de tener todos esos objetos que te gustaban de esa casa. Luego por haber podido vivir todos esos momentos y haber compartido con ellos todas sus experiencias, vivencias, viajes que les hicieron felices.